07 Nov LAS APLICACIONES EXTRAORDINARIAS DEL AJEDREZ

¿Aplicaciones extraordinarias del ajedrez? ¿Una exageración? Cuando leáis esta experiencia lo entenderéis.

Esta experiencia os la va a contar en primera persona, Sergio Gil Abán, Educador Social con Adolescentes en riesgo de Exclusión Social, Orientador Personal y Profesional y Profesor de Formación y Orientación Profesional.

Lo conocí hace ya unos añicos, cuando vino a contarnos su experiencia al seminario de Zaragoza. Y me encantó. Desde entonces, no ha parado de perseguir sus sueños: escritor, os recomiendo sus libros (yo los tengo todos y su lectura me encantó), formador de familias, profesor de FOL, …

Y, en cuanto le dije, que me gustaría compartir su trabajo en nuestra web, ni lo dudo. Así que… Aquí va su Experiencia en un reformatorio de menores…

LAS APLICACIONES EXTRAORDINARIAS DEL AJEDREZ

INTRODUCCIÓN

La vida humana se divide en tres fases: una fase es la de las Obligaciones Fisiológicas. En esta fase, nos dedicamos a mantener nuestro cuerpo en condiciones para continuar con la supervivencia: alimentación, sueño, higiene, cuidados básicos de cualquier ser humano. En la segunda fase están las Obligaciones Sociales, las que son necesarias para el mantenimiento de la cultura y sociedad en la que vivimos y que nos permiten una existencia más relajada, confortable y segura que la de los animales menos sociables. Aquí entran el trabajo y la escuela, entre otros. Por fin, otra tercera parte de nuestra existencia es aquello que denominamos Ocio.

En educación social, el Ocio se considera tan importante como las otras dos. Creo que no exagero al decir que apenas hay media docena de disciplinas científicas en el mundo donde eso sucede. Para el resto de profesionales, incluido para los de la educación, cualquiera de las otras dos tiene un mayor valor y el tiempo de ocio es eso que resta cuando todo lo demás está cumplido. Para los Educadores Sociales esto no es así y cuando un menor ha llegado hasta el punto de cumplir una medida judicial de internamiento, darle una alternativa a ese ocio embrutecedor que aportan la delincuencia, las drogas, el sexo inseguro, el deporte descontrolado en el parque o la plaza del barrio, las peleas y las bandas juveniles, es un mandato obligatorio.

DECLARACIÓN DE INTENCIONES

A lo largo del siguiente artículo iré desgranando cómo lo que empezó como un simple taller de Ajedrez en el Centro de Reforma de Juslibol, se convirtió en una fuente de lo más generosa para reflexionar sobre las aplicaciones extraordinarias de esta disciplina. Aplicaciones que no habíamos tenido en cuenta al plantear el taller, pero que se convirtieron en el pivote sobre el que giraba todo.

Cuando el taller de ajedrez terminó (las causas de esto darían para otro artículo, pero no entraré en ellas ahora), lo que hice fue plasmar tales impresiones en un Trabajo de Fin de Grado en el que pude generalizar a otros colectivos. Tampoco me parece relevante este Trabajo de Fin de Grado puesto que hablaba de asuntos muy alejados de los centros escolares, así que no haré más que una breve referencia a ello.

Como ahora me estoy dirigiendo a docentes, intentaré mostrar de manera sucinta y amena cómo podría enfocarse dentro de un centro educativo, a sabiendas de que eso lo haréis mejor con vuestra experiencia y vuestra perspectiva como profesionales de la educación reglada. Mi intención, por lo tanto, es solo plantar una semilla y que cada cual pueda regarla y abonarla como crea conveniente. Desde aquí mi más sincero agradecimiento por el tiempo que vais a destinar a leerme.

DOS PROYECTOS

GALACHESS

En octubre de 2012 presenté un proyecto para trabajar con los menores internados en un Taller de Ajedrez. Para ello conté con la colaboración de Carlos Abad, monitor nacional de Ajedrez y de un par de educadores que, de manera voluntaria quisieron colaborar. A este proyecto lo denominamos Galachess, acrónimo entre Chess y el Galacho de Juslibol, que es la población donde se encuentra el Centro de Reforma.

Los objetivos iniciales, como dije antes, fueron de corte lúdico. La pretensión era dar a los menores una alternativa de ocio viable para cuando regresasen a la vida en libertad. Sin embargo, conforme avanzaban las semanas, fuimos descubriendo muy sorprendentes aplicaciones del Ajedrez.

ESTRUCTURA DEL PROYECTO

El taller tenía dos partes diferenciadas:

Actividades con monitor, dirigidas.

Estas se realizaban los sábados por la mañana, durante un lapso que venía a durar unos 90 minutos. Cada sesión se dividía en tres etapas:

En la primera el monitor trataba de explicar alguna pincelada teórica, sobre las reglas del ajedrez, teoría de aperturas, medio juego o practicar finales. Esta parte apenas duraba 15 minutos, pues muchos menores mostraban tedio y cansancio.

Tras ella, pasábamos a jugar, en modalidad dirigida. Cualquier participante, fuese jugador, el monitor o yo, podía detener una partida para que los demás aportasen ideas o se dieran cuenta de alguna situación novedosa. También aprovechábamos para probar modalidades diversas del ajedrez (luego haré referencia a ellas) o para hacer que jugasen a partir de una posición dada. Esta parte era la más extensa, durando unos 45 minutos.

Por último, los siguientes 15 minutos restantes se destinaban a juego libre.

Torneos en el tiempo libre

Además de estos encuentros los sábados por la mañana, durante el resto de la semana se potenció el ajedrez en el tiempo de ocio de los chicos, en especial el que disfrutaban justo antes y justo después de la cena. También se organizaron torneos internos en los que se medían con otros internos y contra los educadores que deseaban participar. De esa manera, generalizamos a la vida cotidiana de ellos lo que trabajábamos en las sesiones más dirigidas.

TFG DE EDUCACIÓN SOCIAL

El segundo proyecto surgió a partir de Galachess. Yo ya llevaba tiempo recabando información al respecto para mi Trabajo de Fin de Grado. Mi idea era presentar un trabajo basado en el proyecto Galachess, pero el profesor de la UNED me dijo que generalizase a otros colectivos vulnerables y, debido a lo que había podido observar, decidí hacerlo basado en el apoyo a víctimas de violencia. Me centré en la violencia de género porque era el tipo de violencia de la que encontré mayor volumen de publicaciones y porque, además, encontraba que el Ajedrez es una modalidad lúdica y deportiva muy igualitaria. No hay motivos, más allá de los psicosociales y culturales, para creer que un género vaya a tener ventaja sobre otro en tal disciplina.

Mantuve los objetivos lúdicos, es decir, aportar una alternativa de ocio para mujeres víctimas de la violencia machista, pero con la intencionalidad de ayudar a su socialización cuando regresasen a la vida social tras abandonar los pisos de acogida. En muchos estudios se mostraba la gran dificultad que tienen estas personas para regresar a la vida social y para encontrar grupos en los que poder desarrollarse. Al fin y al cabo, las situaciones aledañas a la violencia dentro del seno de la familia suelen implicar mecanismos de presión por parte del agresor que las alejan de sus amigas y familiares e incluso se encuentran con culpabilización o situaciones vergonzantes que hacen que, una vez fuera del entorno protector de los servicios sociales, no tengan una alternativa de ocio donde empezar a recuperar los aspectos sociales, afectivos y relacionales de sus vidas.

PROYECTOS

Existen miles de proyectos de inserción laboral, de formación para el empleo y de atención psicológica, pero muy pocos incluyen un apoyo en la socialización. Al menos, así era en 2015, espero que en estos años, la situación haya ido mejorando.

Esos objetivos secundarios, que se pretendían conseguir a través del juego eran:

1. Apoyar y guiar la Gestión del Cambio. El trabajo con una disciplina en la que no existen dos partidas iguales y en la que la creatividad se combina de una manera tan perfecta con otras capacidades cognitivas como la memoria o el cálculo, nos parecía una herramienta ideal en el proceso de toma de decisiones y en el análisis necesario.
2. Facilitar el retorno a la sociedad, la Socialización mediante la inclusión paulatina en un club de ajedrez.
3. Mejorar la Autoestima perdida a través de una actividad deportiva y cultural que goza de prestigio social y además, no sexista.

No obstante, a efectos del colectivo docente, creo que serán mucho más relevantes las observaciones y  reflexiones que obtuve durante el Proyecto Galachess que estas otras, puramente teóricas y más alejadas de la realidad escolar.

LAS APLICACIONES EXTRAORDINARIAS DEL AJEDREZ: CONTEXTO DEL PROYECTO

A lo largo del Proyecto Galachess fuimos descubriendo que el Ajedrez ejercía un poderoso influjo sobre los menores que lo iban practicando. Es cierto que este influjo era mayor en los chicos que ya practicaban ajedrez previamente, generalmente en el entorno familiar, así como en los que tenían medidas judiciales más largas, pero hay que tener en cuenta que el desarrollo de estos adolescentes se retrasa mucho. ¿Por qué? Pues por muchos motivos y diversos: a nivel cognitivo, el consumo de drogas y la falta de estimulación; a nivel emocional, las crisis vitales que han sufrido y el constante deterioro de su autoestima; a nivel comportamental, la necesidad de remuneración inmediata, la falta de atención, de hábitos de estudio, etcétera.

Con esto quiero decir que en muchas ocasiones, a pesar de estar ya en etapas avanzadas de la adolescencia, incluso mayores de edad, tenían modos de pensamiento y pautas conductuales que se corresponden con niños de Primaria. No veo mucha diferencia, por lo tanto, en los efectos que se podrían producir sobre un niño de ocho años.

LAS APLICACIONES EXTRAORDINARIAS DEL AJEDREZ CON MENORES EN EXCLUSIÓN SOCIAL

Durante el desarrollo del proyecto, pudimos constatar cómo los menores iban adquiriendo ciertas pautas comportamentales que nos permitieron vislumbrar cambios en aspectos más profundos y que tenían que ver con:

Intervención victimológica

Durante las partidas de ajedrez que se celebraban en los tiempos de ocio, fuera del taller, los menores se mostraban muy expresivos. Hablaban de sus vidas anteriores, evocaban momentos familiares o situaciones complejas. El ajedrez parecía ayudar a la introspección, lo cual nos hizo verlo como una gran herramienta para personas víctimas de violencia, capaces de evocar frente al tablero lo que no eran capaces de sacar en otras circunstancias.

Trasládese esto a víctimas de acoso escolar, por ejemplo. O a los acosadores, también. Generalmente un abusón del instituto suele ser un chaval con una historia terrible, y silenciada, detrás.

Trastornos del ánimo

Vivir en un Centro de Reforma, por más que se diga que es una guardería y unas vacaciones, es una crisis terrible para los chicos. Están alejados de sus familias, en un entorno controlado y vigilados 24/7, carentes de libertad y debiendo cumplir con un código de conducta que es todo lo contrario a su zona de confort. Aunque la infancia y la adolescencia se caracterizan por una rápida adaptabilidad al entorno, sigue siendo muy complicado en lo emocional.

Todos ellos se ven afectados de una u otra manera, pero dentro de ese paradigma, hay menores que lo llevan todavía peor. Esto suele suceder justo antes o justo después de un juicio, o cuando una situación personal o familiar les es hostil. Esos menores se mostraban mucho más proclives a participar que los otros y cuando acudían al taller, lo hacían dando muestras de mejoría. Como cualquier actividad deportiva, estimula a crecer, desarrollarse y vencer la adversidad.

Afrontamiento de la Violencia y de los Trastornos de Conducta

Se dieron casos sorprendentes de menores que en la calle eran enemigos acérrimos. Tenían un amplio historial de agresiones mutuas y de hostilidad manifiesta, pero cuando se sentaban frente al tablero, se daban la mano y jugaban con total deportividad e incluso se mostraban amigables. La situación era mucho más evidente que en otras actividades como el fútbol-sala o los ratos de ocio, donde procuraban esquivarse o evitarse, o donde daban rienda suelta a una competitividad muy dura entre ellos. En el ajedrez, se mostraban como caballeros y hasta felicitaban al ganador cuando tocaba. No se sentaban juntos a ver una película, pero sí se buscaban para terminar la partida que tenían a medias.

Socialización entre iguales

Por fin, la socialización, el deseo de compartir la experiencia con otros. Ni el monitor de ajedrez ni yo obtuvimos autorización para desarrollar esta parte como nos gustaría, pero en las escasas ocasiones en que sí nos permitieron alguna pequeña actividad externa, obtuvimos resultados excelentes. Salimos a jugar simultáneas con el GM Daniel Forcén, participamos un menor y yo en un torneo de partidas rápidas en beneficio de Aspanoa y en otro organizado por una Escuela de Ajedrez de Zaragoza. Logramos traer al FM Daniel Romero a jugar simultáneas a ciegas contra tres de nuestros chicos. Dos de los menores manifestaron su intención de entrar en clubes de ajedrez al terminar su medida, aunque esto último no pudimos constatarlo ya que por las circunstancias del Centro y de sus Medidas Judiciales resultaba complicado mantener el contacto.

Recuperación y Desarrollo Cognoscitivo

He reservado un hueco al principio a la Recuperación y Desarrollo Cognoscitivo no porque nosotros hayamos experimentado con ello. Ni era nuestro objetivo, ni tenemos la capacidad ni conocimientos para algo de semejante envergadura, sino porque gracias a Galachess, pudimos contactar con la Comunidad Terapéutica La Garrovilla, en Mérida. Se trata de un centro de rehabilitacion de personas adictas donde se trabaja a través del ajedrez para lograr precisamente eso, la recuperación cognitiva después de una larga etapa de consumo de estupefacientes y alcohol. Esta Comunidad está en contacto permanente con el Club de Ajedrez Magic, especializado en los usos terapéuticos del ajedrez no solo con personas adictas sino con muchos otros colectivos vulnerables.

PROFECÍAS …

Algo muy importante, y a lo que me referiré de nuevo al final de este pequeño artículo es que entre los menores del Centro de Reforma existen dos modalidades de Profecía Autocumplida que en las partidas de ajedrez podían trabajarse con relativa facilidad.

PROFECÍA 1

Por un lado, están esos mensajes pesimistas que han recibido durante toda su vida y que los señalaban ya como malvados, incapaces, incultos u holgazanes. En esto hemos participado la sociedad entera, no solamente sus familiares. Vemos un menor haciendo botellón e, incluso en silencio, con nuestro lenguaje no verbal, le estamos lanzando el mensaje de «eres un desecho social, no mereces estar entre personas civilizadas». Lo hacemos sin darnos cuenta, despreciamos de ese modo todo lo demás que tiene ese chico y nos centramos en lo malo.

El mensaje social es muy poderoso y un modo de contrarrestarlo es demostrar al menor que puede ser algo más que eso que le dicen que es. Que hay más en él que un gamberro o un consumidor de cánnabis. Resulta difícil creerse tales mensajes negativos (canalla, vago, sinvergüenza…) cuando gana el campeonato de ajedrez del Centro de Reforma, cuando se ríe al jugar al Pasapiezas  con su peor enemigo o cuando le captura la Dama al educador que le está enseñando la Apertura Española.

PROFECÍA 2

Por otro lado, todos los seres humanos seguimos patrones familiares que tendemos a repetir. Muchos artistas, deportistas, músicos o literatos son hijos e hijas de alguien que ya practicó tales artes. Lo mismo pasa con profesiones como médicos, maestros, abogados… Pensemos ahora en términos menos halagüeños: mi padre fue a la cárcel, mi abuelo fue a la cárcel, mi hermano fue a la cárcel, queda claro que yo iré a la cárcel. En este caso, frente al tablero, la pregunta es clara: ¿alguno de ellos jugó al ajedrez? No.

Pues si tú has cambiado eso, también puedes cambiar lo otro, ¿no crees? Este mensaje, tan aparentemente sencillo, es muy poderoso. Eres capaz de hacer cosas que nadie antes en tu familia ha hecho: has jugado un torneo de ajedrez, has jugado simultáneas con un Gran Maestro Internacional, sabes cómo funciona la Defensa Petrov, conoces la ajetreada y misteriosa vida de Bobby Fischer.

¿CUÁNDO? ¿CÓMO? ¿QUIÉN?

Sea mucho o sea poco, lo que conseguimos con Galachess no fue porque aplicásemos técnicas elaboradas o novedosas, qué va. Nosotros jugábamos al ajedrez y, todo lo más, hacíamos alguna modificación para trabajar algún aspecto concreto.

Un ejemplo sencillo es jugar con el reloj al revés. En el ajedrez tradicional, uno pulsa el botón cuando ya ha movido y empieza a descontar el tiempo del contrario, pero nosotros practicábamos al contrario. Una vez se pulsa el botón, el jugador TIENE PROHIBIDO MOVER hasta que hayan pasado 10 segundos. De esa manera, corregíamos la impulsividad y obligábamos a pensar.

Al margen de cosas tan sencillas, no aplicamos ninguna técnica especial, no creo que pueda contaros nada que no hayáis hecho vosotros en vuestro aula mil veces. Lo que sí hicimos es reflexionar y aplicar un paradigma educativo que explicaré a continuación, tras el título de ¿Qué es el ajedrez?

LAS APLICACIONES EXTRAORDINARIAS DEL AJEDREZ: COMO ENTENDER EL AJEDREZ

Nos dimos cuenta de que existen diversas formas de entender el ajedrez y cada una tiene aplicaciones muy variadas, requiere de ciertos condicionantes y se obtienen resultados de índoles diferentes.

ENFOQUE DEPORTIVO

Entender el ajedrez de un modo deportivo.  Esta visión nos proporciona la posibilidad de trabajar aspectos como la superación personal, la resiliencia, el aprender a ganar y aprender a perder… ¿Qué os voy a contar, maestros y profesores de Educación Física? Casi, casi, es la base central de vuestro currículo. Sin embargo, como en nuestro caso el objetivo era ayudar a la Socialización, esta se conseguiría incluyendo a los menores en torneos, eventos y jornadas para, eventualmente, conseguir que se integrasen en algún club y compitieran de manera federada.

ENFOQUE COMO DISCIPLINA

Entender el ajedrez como una disciplina científica y mecanicista, aportaría grandes beneficios a nivel cognitivo: memoria, capacidad de concentración, pensamiento convergente, aprendizaje de técnicas de estudio y, por supuesto, didáctica del método hipotético-deductivo. Sobre esto hay amplia literatura al respecto y, trabajando con el tipo de menor que trabajábamos, era una tarea muy alejada de nuestras expectativas. No obstante, los alumnos que sientan gusto por las Ciencias se verían muy beneficiados en su vertiente socializadora al participar en congresos, jornadas y eventos, o estudiando teoría de aperturas y técnicas de finales.

ENFOQUE ROMÁNTICO

Una perspectiva Romántica del ajedrez nos lleva a considerar este como un arte, una disciplina de gran potencial expresivo y que ayuda al pensamiento divergente. No importaría tanto cuál es la solución correcta, sino cuántas posibles opciones tienes. Este tipo de ejercicios son muy comunes en la enseñanza del ajedrez, ¿dónde debes situar la Dama para que amenace a la mayor cantidad posible de piezas enemigas? ¿Cuántos movimientos posibles tienes a partir de una posición dada? ¿De qué manera moverías un caballo de aquí hasta aquí sin que atraviese una casilla amenazada? No importa si esos movimientos son buenos o malos en una partida real, importa que seas capaz de verlos y de valorarlos. Este tipo de ajedrez es coadyuvante para asignaturas como la historia, la literatura o la educación plástica y artística, nos permite usar el ajedrez como potenciador de la creatividad.

MEDIO JUEGO

El Medio Juego es la fase del ajedrez en la que ya resulta muy difícil decir «ante este movimiento, este es el mejor» y casi para cualquier movida, se necesitan valorar muy diversas opciones. Por eso, trabajar el medio juego obtendrá mayores beneficios respecto al desarrollo de la creatividad y a la parcela romántica y artística que tiene nuestro juego de reyes.

ENFOQUE DEL AJEDREZ COMO ACTIVIDAD DE OCIO

• Por fin, hay un modo de entender el ajedrez que es cien por cien lúdico y no tiene más intencionalidad que la de entretener. Esto, que puede parecernos trivial y pérdida de tiempo, tiene un potencial tremendo para la Socialización de los menores. Como decíamos al principio, el acceso a alternativas de ocio son fundamentales y potencian esa participación social tan necesaria. Tengamos en cuenta que, ¿qué es un centro de reforma o, en adultos, una prisión? El lugar donde ponemos a las personas que, entendemos, no están preparadas para convivir en sociedad con los demás. En el caso de chicos de institutos o de escuelas de primaria, los menores que están más incómodos en situaciones sociales, que tienen comportamientos disruptivos, podrían obtener beneficios si en lugar de verse apartados del resto pudieran disponer de tiempo para jugar, sin más intencionalidad que ocupar su tiempo en una actividad pacífica, sana y culturalmente aceptada.

LAS APLICACIONES EXTRAORDINARIAS DEL AJEDREZ: AJEDREZ EDUCATIVO.

Existe una perspectiva más: la nuestra, la perspectiva educativa. Es perfectamente compatible con cualquiera de las anteriores y quizá extraiga de todas un poquito. Se trata de ver el Ajedrez como lo que es: un juego. La principal vía de aprendizaje colaborativo y social del ser humano, el juego, tan sencillo como eso. A través del juego se aprende sin darse cuenta, sin sistematizar apenas. Aprendemos a seguir unas reglas, aprendemos a colaborar con otros, a entender el mundo que nos rodea, aprendemos que tanto el éxito como el fracaso son algo temporal. De hecho, ganar o perder resulta secundario porque disfrutas igualmente.

El ajedrez se conforma como una herramienta muy versátil para la ludificación de distintas áreas, desde leer textos basados en el ajedrez o hacer una manualidad basada en las piezas y los peones hasta usar ciertos movimientos para entender algún concepto geométrico. De esto tampoco os hablaré porque estoy seguro de que manejáis tales aplicaciones mucho mejor que yo. Es vuestro campo, al fin y al cabo.

MODALIDADES DE JUEGOS

Sí que os invito a probar las modalidades alternativas de ajedrez como Tres Jaques, Pasapiezas (también llamado Crazyhouse), el Rey de la Montaña (King of the Hill en inglés) o el Ajedrez960 de Fischer. En manos de un docente dispuesto a poner a prueba su creatividad, son un excelente recurso didáctico. Este tipo de partidas fueron muy útiles, por ejemplo, con menores que estaban separados del grupo por conductas violentas. En el caso de un centro escolar al uso, mantener a un menor «castigado» en clase durante un recreo, por ejemplo, sería un equivalente. Se aprovechan este tipo de juegos precisamente para lo que comentábamos antes: poder hablar de manera distendida sobre lo sucedido, descubrir causas y motivaciones ocultas para su comportamiento o, sencillamente, hacer que ese tiempo fuera tenga un carácter constructivo además de punitivo.

EVALUACIÓN

Por otra parte, es perfectamente válida una Evaluación de la actividad tanto en lo objetivo (traducido en conductas observables, reducción de amonestaciones, &c.) como en manifestaciones más subjetivas, como el comportamiento dentro y fuera del aula, la sensación de bienestar personal, mejoría en las relaciones con iguales o profesorado. El departamento de Orientación creo y espero que convenga en que pueden establecerse unos objetivos comportamentales e ir evaluándolos conforme avanza el curso. Recomiendo, pues, una evaluación idiosincrática que nos permita comparar al alumno con respecto a sí mismo en unas etapas anteriores.

LAS APLICACIONES EXTRAORDINARIAS DEL AJEDREZ: Reflexión final

La clave, una vez más, está en entender que es la Participación lo que ayuda a socializar, que sentirnos parte del colectivo, contribuir y cooperar, intervenir en la vida cotidiana de los centros educativos, es lo que nos permite vernos como parte del grupo y no como un elemento disruptor o rebelde.

Somos lo que los demás quieren que seamos. Eso que comentaba antes sobre la Profecía Autocumplida o sobre los Patrones Familiares, nos lo encontramos a todas horas en niños y adolescentes. Los mensajes negativos no ayudan en absoluto. Si el alumno está convencido de que su lugar en el grupo es ser el gracioso de clase, el gamberro o incluso el matón del instituto, jamás dejará de serlo. La clave para todo esto está en hacerle ver que puede ser otra cosa: el campeón de ajedrez, el que mejor se le da jugar al Rey de la Montaña, el que escribió ese relato tan chulo sobre un Caballero que saltó por encima de una Torre para capturar un peón que amenazaba a su Dama.

Espero, sinceramente, que pongáis a prueba eso que los yanquis dicen de thinking outside the box, en este caso, outside the board. Muchísimas gracias.

 

Este artículo es para leerlo y releerlo con detenimiento. No créeis? Estaremos encantados de conocer vuestras reflexiones al respecto, y por supuesto, si queréis contarnos vuestra experiencia sería estupendo porque recordad que COMPARTIR ES CRECER.

Desde aquí, queremos aplaudir el gran proyecto que Sergio llevo a cabo y sobre todo AGRADECERLE SU GENEROSIDAD al compartirlo aquí con todos. Actualmente, trabaja de free-lance, formando a padres y madres, y docentes. Así que no dudéis en llamarlo para vuestras formaciones porque son muy muy interesantes y enriquecedoras. Yo como mamá, he tenido la suerte de comprobarlo.

¡¡¡1,2,3 AJEDREZ!!!